Este blog nace de un grupo de hermanas hospitalarias y laicos con la inquietud de vivir los valores de la hospitalidad y compartirlos con todos.

24 septiembre 2008

GRAN DEPORTISTA, EN LA VICTORIA Y EN LA DERROTA



El número uno del tenis mundial, el español Rafael Nadal, fue galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de los Deportes 2008, por ser un “deportista ejemplarizante” Samaranch leyó en Oviedo el acta en el que se reconocen "los méritos contraídos por el ganador, tanto en competiciones del Grand Slam, como en la obtención del número uno del mundo".
También se resaltó su comportamiento, "tanto en la victoria como en las escasísimas ocasiones en que conoce la derrota", en las que se manifiesta como "gran deportista". "Es particularmente impecable su reacción en los triunfos más importantes y el modo en que destaca la labor de sus oponentes", consta en el acta.
Asimismo valoró que Nadal creó, recientemente, una Fundación “que lleva su nombre, de carácter benéfico, destinada a la asistencia social a colectivos desfavorecidos

y a la cooperación al desarrollo”.

1 comentario:

Unknown dijo...

Los españoles podemos sentirnos orgullosos de tener un deportista que, además de ser un número uno mundial, es un buen ejemplo para quienes siguen su carrera, especialmente los más jóvenes, tan necesitados de referentes morales. Y esto no es muy corriente.

Rafael Nadal es un joven que a su edad ya tiene más de lo que nunca imaginó que podría tener: éxito profesional, fama, dinero y reconocimiento público. Y a pesar de ello, sigue siendo un muchacho normal, con un comportamiento adecuado y sensible con los necesitados.

Me alegro por el premio que ha recibido, porque se lo merece. Creo que se premia al deportista y a la persona. Es un buen ejemplo para los muchos jóvenes que le admiran.